lunes, 19 de noviembre de 2007

Pensamientos en TIMES NEW ROMAN 12


Alguna vez escuché que Pablo Picasso dijo "que la inspiración existe, pero tiene que encontrarte trabajando". Debo reconocer que últimamente he estado bastante escaso de inspiración. Y no sé a que sea debido, porque mira que ha habido material en estos días sobre el que reflexionar. Tal vez sea que cuando ésta pasaba a mi lado, no me encontraba trabajando. Todo puede ser no digo que no. Así que por falta de ideas me dediqué a buscar algo sobre Gregorio Marañón, el verdadero Trapero de Tiempo. Pensando que a lo mejo su impactante figura pudiese abrir cauces a mi lángida imaginación.

Tras una detallada y minuciosa búsqueda, infructúoso fue el resultado. Mientras más buscaba más me veía abocado al fracaso. Una especie de vertiginosa espiral, me arrastraba al más profundo precipicio. Y es que esto de escribir te crea una necesidad fisiológica. Que en un principio se aguanta, se soporta, se tolera, pero llega un momento en que... no da más de sí. Y es que la pluma, o mejor dicho las teclas, hay que sacarlas a pasear como a la perra de Nuria mi vecina del sexto. Y yo llevaba tiempo sin salir a pasear. Hasta que por cuestiones del azar, encontré Times New Roman 12. Es decir, el enlace de un blogero que me había añadido a su lista de favoritos con este sobrenombre: Pensamientos en Times New Roman 12. Si soy sincero, me gustó y mucho. No sé si fue ego, soberbia u orgullo, pero en un santiamén la inspiración se topó conmigo. Fue como si nunca nos hubiéramos separado.

Parece mentira el influjo positivo que produce en los demás, el que nos preocupemos y ocupemos de ellos. Es la mejor medicina para sacudirse la tristeza del alma.