domingo, 16 de mayo de 2010

Como la vida misma



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En algún post anterior señalé el gran número de personas que se acercaron estos días a la parroquia, durante la Novena en honor a Nuestra Señora de Fátima. Destaqué las numerosas muestras de afecto de los fieles a la Virgen, pero nunca imaginé que tres días después de la festividad de Fátima las muestras se sucediesen. Y es que hoy por la tarde, al disponerme abrir la puerta de la parroquia, me encontré que al meter la llave en la cerradura, ésta no entraba en la misma. Tras hacer varios intentos, decidí agacharme para ver lo que impedía a la llave girar. Pasmado vi como algunas monedas estaban dentro de la ranura de la cerradura, lo que impedía que la llave entrase. La situación no era nada cómoda: Domingo por la tarde, mañana es festivo regional, el cerrajero a saber donde lo encuentro. Los minutos corríana y la gente a punto de llegar.

Alma, calma. En ese momento hice por recordar las clase de bricomanía, pero los intentos por retirar la limosna que un par de feligresas me dejaron en la puerta, resultaron todos fallidos. Así que opté por llamar a un buen amigo que de estos trabajos sabe bastante. Fue llegar él, sacar sus herramientas de trabajo y recuperar esas monedas que, quiero pensar, son lo poco que tenían esas mujeres, para ofrecer a la Virgen. Seguro que ellas, como la viuda del Evangelio, dieron todo lo que tenían. Algunas personas de la parroquia, al ver el dispositivo de actuación de mi amigo, pensaron que alguien quiso hacer daño a la parroquia. Yo prefiero pensar, lo que escribí anteriormente. Y es que seguramente, al no ver ninguna ranura donde depositar la ofrenda a la Virgen, la dejaron en la ranura de la cerradura.

Sirvan estas líneas para agradecer a este buen amigo, pues seguramente sin él, a estas horas seguiría buscando cerrajero.

4 comentarios:

Juan Luis dijo...

¿Quién dijo que la ficción supera a la realidad? Increíble... pero cierto. Ánimo amigo... ya ves que la cruz tiene muchas aristas... gracias al ángel cerrajero.

Anónimo dijo...

aplicación práctica de "quien tiene un amigo tiene un tesoro"
me reitero no obstante: hay cosas que sólo os pasan al coyote y a tí.
como siempre, la realidad supera a la ficción. la próxima, por favor echen sus donativos por debajo de la puerta, si el amplio horario de la parroquia les queda corto.
gracias!
carmen

Anónimo dijo...

p.d. a qué viene la foto de ZP?
carmen

Anónimo dijo...

eso la foto?

es el cuento contado desde el punto de vista de una persona GENIAL!

naircha