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Los sacerdotes tenemos una vez al mes, un día de retiro espiritual. Un día que esperamos como agua de mayo. Ayer me tocó hacerlo. Suelo hacerlo en el Seminario. Un lugar al que llegué llorando el 30 de septiembre del 2000 y del que me fui de la misma manera, el 19 de junio de 2006. Sin duda hay fechas que nunca se olvidan. Y es que el Seminario es el hogar más que el lugar, donde los candidatos al sacerdocio nos formamos a lo largo de seis arduos años. Podíamos decir de él que es la casa de todos los sacerdotes. Donde nadie es extraño ni forastero.
El Seminario Mayor San José, fue donde compartí las 24 horas al día con los demás seminaristas, con los formadores y por supuesto, con Dios. Cuando entré decía , jocosamente, que el Seminario era como el Gran Hermano, que ese año se estrenó, pero el nuestro no era mixto, sin embrago también tenía su confesionario. Y no estaba tan desatinado... en ese año más de uno recibió la nominación.
Han pasado los años, ha cambiado el Seminario, sus aulas, se incrementó el número de seminaristas, les han puesto wifi, les han puesto un nuevo confesionario y han estrenado una nueva capilla. Cambia el inmobiliario, las personas, las circunstancias y las épocas, pero el Seminario seguirá siendo siempre el hogar de todos los sacerdotes.
El Seminario Mayor San José, fue donde compartí las 24 horas al día con los demás seminaristas, con los formadores y por supuesto, con Dios. Cuando entré decía , jocosamente, que el Seminario era como el Gran Hermano, que ese año se estrenó, pero el nuestro no era mixto, sin embrago también tenía su confesionario. Y no estaba tan desatinado... en ese año más de uno recibió la nominación.
Han pasado los años, ha cambiado el Seminario, sus aulas, se incrementó el número de seminaristas, les han puesto wifi, les han puesto un nuevo confesionario y han estrenado una nueva capilla. Cambia el inmobiliario, las personas, las circunstancias y las épocas, pero el Seminario seguirá siendo siempre el hogar de todos los sacerdotes.
2 comentarios:
YO, LA 1ª VEZ QUE PISE EL SEMINARIO (Y NO ERA SIN TIEMPO) FUE HACE POCO CUANDO CELEBRO EN EL SU ANIVERSARIO EL OBISPO, VAMOS HACE POCO. EFECTIVAMENTE, NO ME PREGUNTES QUÉ, PERO ME SENTÍ COMO EN CASA. EL ULTIMO MES HE PASADO MUCHIIIIISIMAS VECES POR DELANTE Y ME SALE ESPONTANEAMENTE UNA PETICION Y UN GRACIAS POR LOS CHICOS QUE EN EL SE FORMAN Y SUS EDUCADORES.
Primero aclarar que los retiros a veces nos sientan como agua de mayo a todos, no solo a los sacerdotes.
Veo que tu blog va prosperando poco a poco. A veces se considera "dificil" la vida para un católico en la actualidad. Lo cierto es que la vída no es dificil, la mayor parte de las veces somos nosotros los que la hacemos dificil.
Ánimo y suerte con el blog
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